A pesar de que la Corte ha dictado medidas cautelares que son vinculantes para Israel, las masacres contra el pueblo palestino no han cesado. La ciudad de Rafah es el siguiente objetivo para el régimen de Netanyahu. El pasado viernes 9 de febrero, la Oficina del Primer Ministro anunciaba que “los civiles deben evacuar las zonas de combate de dicha ciudad que representa el último bastión de Hamas.”
Ante las declaraciones del Primer Ministro Netanyahu hubo advertencias para Israel. Arabia Saudita anunció que las repercusiones serían graves si la ciudad es atacada, dado que es el último lugar al que han podido huir miles de civiles de las brutales agresiones israelíes; el país también reiteró su exigencia de un alto al fuego. Estados Unidos expresó que la invasión sería “un desastre”. El secretario de Asuntos Exteriores del Reino Unido, D. Cameron resaltó que en Rafah se encuentra refugiada más de la mitad de la población de Gaza y que se encuentra profundamente preocupado por la iniciativa de una ofensiva militar allí. El Ministro de Relaciones Exteriores holandés Bruins Slot, advirtió que dicha incursión terrestre implica «muchas víctimas civiles» porque las personas han huido allí y que se provocará una catástrofe humanitaria que no tiene justificación. Naciones Unidas expresó que ya no hay sitio seguro para los más de un millón de palestinos que se han desplazado a Rafah.
Los mandatarios de Hamas anunciaron que llevar adelante el ataque terrestre contra Rafah conducirá a “decenas de miles» de refugiados a convertirse en víctimas. Advirtieron además que se verían afectadas las tratativas sobre la posible liberación de los rehenes israelíes que se encuentran en Gaza. Netanyahu insiste en que “la victoria está al alcance” y que debe eliminar a los batallones de Hamas que se encuentran en Rafah. Remarcó que quienes se expresan en su contra están diciendo que Israel debe perder la guerra y dejar a Hamas funcionando en la ciudad.
En su presentación urgente, Sudáfrica expone que los ataques militares sobre Rafah ya han comenzado, que los mismos son de una intensidad sin precedentes y van acompañados de la amenaza de una invasión terrestre que atenta contra 1.4 millones de palestinos que huyeron a allí, cumpliendo con las órdenes de evacuación dictadas por las fuerzas armadas israelíes. Asimismo, destaca que no puede atacarse a más de la mitad de la población completa de Gaza que se encuentra refugiada en improvisadas tiendas de campaña en la ciudad, ya que no hay lugar a donde puedan encontrar refugio. Los últimos hospitales que quedan en funcionamiento, los mercados y sistemas de agua se encuentran en Rafah. Obligar a los civiles a evacuar nuevamente implica más hambre y enfermedades que se extenderán aún más por la población causando una tragedia “interminable” que incluso llegará a colapsar la respuesta humanitaria de las ONGs que trabajan en el lugar, afirman en el documento presentado.
Sudáfrica expresó ante la CIJ estar «profundamente preocupada de que la ofensiva militar sin precedentes contra Rafah, anunciada por el Estado de Israel, ya ha provocado y resultará en una mayor matanza, daños y destrucción a gran escala, en violación grave e irreparable tanto de la Convención sobre el Genocidio como de las medidas ordenadas por el Tribunal el 26 de enero de 2024.” Como bien indica Sudáfrica en su petición, Rafah es una ciudad que habitualmente alberga a unos 280 mil palestinos y hoy tiene a más de un millón de personas refugiadas allí.
Ante esta grave situación ha solicitado a la Corte que considere, en el ejercicio de sus facultades, la aplicación del artículo 75 inciso 1 del Reglamento del Tribunal, que establece que: «La Corte podrá en cualquier momento decidir examinar proprio motu si las circunstancias del caso requieren la indicación de medidas provisionales que deban ser adoptadas o cumplidas por alguna o todas las partes”, sin la necesidad de audiencias ni presentaciones orales de las partes. Sudáfrica también se reservó su derecho a tomar medidas adicionales con respecto a la situación.
La petición de medidas cautelares adicionales se encuadra en el caso por genocidio contra Israel presentado por la República de Sudáfrica ante la Corte, la cual a dado lugar a que éste se trate ya que consideró que İsrael se encuentra en “violación plausible” de sus obligaciones en cuanto dicta la Convención sobre el Genocidio.
Una vez más Sudáfrica intenta evitar una nueva e inminente violación de los derechos de los palestinos en Gaza.
Fuente: Urgent request for additional provisional measures